El pasado 14 de junio al inicio de una conferencia de prensa en Budapest, el jugador de la selección portuguesa, Cristiano Ronaldo, realizó un gesto en el que cambiaba de lugar un par de botellas de Coca-Cola y en su lugar colocaba una botella de agua.
https://www.lavanguardia.com/cribeo/fast-news/20210616/7534103/perdidas-millonarias-coca-cola-gesto-despectivo-cristiano-ronaldo-eurocopa.html
Dicho gesto también estuvo acompañado de una expresión facial concreta, de una verbalización clara dado que el micrófono de Cristiano Ronaldo estaba abierto y de una postura corporal que acompañó a la acción, pero sin duda lo mollar de este asunto es el gesto.
Todos tendemos a acercar aquello que nos gusta o nos satisface y a alejar aquello que nos disgusta o nos genera rechazo, lo hacemos de forma inconsciente y también de forma inconsciente lo percibimos, no hacen falta las palabras, nuestro cerebro lo interpreta de forma automática, por eso en este caso el gesto aunque no hubiera ido acompañado de la verbalización de Cristiano Ronaldo diciendo «Coca-Cola» o «agua» al reubicar la botella de agua lo hubiéramos interpretado de la misma forma.
Este gesto que a priori no parecía tener mayor relevancia, parece ser que no pasó desapercibido en los mercados bursátiles y la Compañía Coca-Cola perdió al día siguiente 4.000 millones de dólares. Hay quien defiende que esta pérdida millonaria fue fruto de dicho gesto, también hay versiones que apuntan desde la propia empresa a que dichas pérdidas coincidieron en el tiempo con una liquidación de dividendos.
Sea como fuere lo que está claro es que en comunicación no verbal hay que prestar mucha atención al canal de los gestos ya que estos pueden desencadenar una reacción de alto impacto en nuestros interlocutores o espectadores, y bajo mi opinión el problema no son tanto las pérdidas millonarias, que también, sino lo incalculable del gesto de Cristiano Ronaldo para la reputación de Coca-Cola.
¿Piensan que Coca-Cola se va a quedar de brazos cruzados en su relación como sponsor de la UEFA?
Tengan cuidado con los gestos, impactan más de lo que nos imaginamos.
¡Ah!, y no lo duden, pongan a un experto en comunicación no verbal en su vida.